-María Laura, ponete en bolas…. Dale.
- Estas loco, vos.-
- Che, se resiste la nena….. así que démosle una lección por su desobediencia……acto seguido se me vinieron encima, no escuchando mis ruegos, me quitaron, zapato, tangas, dejándome desnuda, ya siendo pasta de besos, lamidas, palmaditas con toda clase de toqueteos muy subidos de sexualidad y sin respeto.
Los comentarios, palabras y cosas soeces que me dijeron son aquellas propias de muchachones atrevidos, porque de yegua puta, a diosa divina….. Me dijeron de todo.
- Quizás haya sido la bebida, o mi cabeza liviana. Aquello me pareció un juego, nada más. Pero comenzó a ir cada vez a mas, porque ya me mordían los pezones, dedos se metían en mi vulva y hasta alguno oso meterme un dedo en el hoyito trasero…… dando la impresión que yo flaqueaba en mis defensas porque deje de gritar solicitando que me dejaran, a solicitar que no me hicieran daño. –Hagan lo que quieran, pero no me lastimen, está.-
Bajaron un poco la música, atenuaron las luces, pero aumentaron sus requerimientos, porque bailando en circulo, fui pasando de brazos en brazos, para ir notando que cada vez se ponían mas requeridores…. a punto que ya alguno sacaba su cosa y me la refregaba en mi cuerpo.
Allí comprendí, que la cosa no iba a ser de fácil manejo, porque no parecían tener freno, a mi se me estaba desgastando el caucho moral para comenzar a perder liquido de freno, mas jugos que aparecían en mi entrepierna, fruto de un recalentamiento prematuro.
Decidí ir a boxes, baje la velocidad, y les pregunte
- che, que quieren de mí.-
- Te queremos coger, Laurita, bien cogidita.
- Fue como si me hubieran recargado combustible, llantas nuevas y otra vez a la pista….. Porque Salí arando y derrapando entre un mar de manos y pijas, que chupaba a izquierda y derecha.
Mi adicción al sexo oral estuvo totalmente cubierta, porque fueron los cinco que metieron sus lenguas en mi cuevita, haciéndome desparramar alaridos de placer.
No podría decir cuantas veces chupe y chupe, ni en que orden, si se que pronto estaba allí, en cuatro patas, siempre con una dura pija haciéndome gemir cuando se metía en mi abierta vagina, con alguna pija que golpeaba mi espalda, sin dejar de tener una buena porción dentro de mi boca. Nunca me había pasado, pero me había emputecido de golpe, sacudiendo mis curvas para que ellos disfrutaran de mi cuerpo, totalmente ofrecida, dispuesta a quemar etapas, vuelta a vuelta.
Sentí que mis piernas se aflojaban más y más fruto de mis orgasmos furiosos, debilitando mis fuerzas…. Pero antes de que se detuviera la maquina, uno de ellos resolvió empujar mi humanidad desde atrás sacándome furiosos gritos de desesperación al sentir que me rajaban el culito. Se que aquellas nalgas son de las mas miradas en cada carrera, que este culito mío es deseado por miles, y ahora estaba siendo taladrado por los chico de mantenimiento de una forma brutal. El caño de escape suele ser a veces un elemento importante en el logro de satisfacción.
Los tiempos eran libres, no había cronometro ni orden, algunos se salían de pista rápidamente, otros rendían vueltas y vueltas mejorando performances.
La música era suave, las luces eran las del amanecer en aquel circuito chaqueño, ellos exhaustos, satisfechos, pero siempre mimosos, tratándome suavemente…..me había recontra cogido toda la noche. Fue mi festejo debut en la categoría.